David Fernandez

David Fernández nace en el corazón del norte de Lanzarote, con un proyecto vitivinícola que representa la esencia del vino natural. También refleja su pasión por el terroir volcánico de la isla.
Este joven enólogo lanzaroteño lidera una revolución silenciosa bajo la Denominación de Origen Lanzarote. Su apuesta combina prácticas sostenibles, mínima intervención y una conexión profunda con la tierra.

Vinos naturales de Lanzarote con identidad propia

Con una producción limitada de 7.000 litros, los vinos de David Fernández destacan por su autenticidad. También por su baja graduación alcohólica y por el respeto absoluto a la naturaleza del fruto.
Cada vino nace sin aditivos, sin filtrados ni clarificados. Así conserva toda su estructura, textura y personalidad.

Desde sus inicios, David ha enfocado el proyecto en parcelas únicas. Muchas de ellas son viñedos familiares recuperados, situados principalmente en el norte de Lanzarote.
La diversidad de terroirs y el uso de métodos de cultivo tradicionales aportan una riqueza única a cada etiqueta.

Este proyecto ha evolucionado hasta consolidarse con una gama de 11 vinos naturales. Todos ellos se elaboran de manera artesanal y con levaduras autóctonas.
Gracias a este enfoque, es posible descubrir las diferentes expresiones del paisaje volcánico a través del vino. Cada etiqueta destaca por su variedad, su procedencia y su método de elaboración.

Formación, juventud y compromiso

A sus 28 años, David Fernández es uno de los nombres emergentes en el mundo del vino natural. Con una formación en agroingeniería y una sólida experiencia junto al equipo enológico de Bodega El Grifo, ha demostrado que es posible unir tradición, innovación y sostenibilidad en una misma botella.

Desde 2019, David transforma no solo los viñedos de su familia, sino también la manera de entender el vino en Lanzarote: vinos sinceros, vivos y profundamente ligados a su origen.

¿Buscas vinos naturales de Lanzarote?

En nuestra selección encontrarás las referencias más destacadas del proyecto de David Fernández, vinos con alma volcánica que están redefiniendo la viticultura en las Islas Canarias.